Primeramente en Nairobi trabajando en las escuelas de dos slums de la ciudad: Kibera y South B. En estos asentamientos viven más de 1 millon de personas en absoluta miseria, En South B (barrio musulman) no entran practicamente occidentales y ellos supieron ganarse la simpatía de los niños y profesores. Comenzamos dando el “mingau” (papilla de cereales) diariamente a 400 niños, y en 2018 ya eran 700 los niños que podian tomar almenos una vez al dia algo de comida. Los Hellwig, misioneros del siglo XXI compartieron con ellos no solo comida sino también su corazón y el mensaje de esperanza y amor de Dios, a través de canciones, juegos, abrazos y historias inspiradoras de la Biblia que seguramente habrán dejado huella en muchos de esos niños.